La escena que narra este pasaje de la Biblia la encontramos luego de la redención de Dios a Israel de la esclavitud de Egipto. En medio de un impresionante despliegue de milagros, señales y maravillas, el pueblo ha visto a Dios actuar a su favor. Con una sonrisa de esperanza han salido de la tierra de esclavitud. Moisés adelante, abriéndoles camino avanza ilusionado con la tierra prometida. Ellos saben que no van solos, Dios les acompaña en la aventura de la libertad, EL ha prometido serles Escudo y Protección. Los días de angustia y opresión quedaron atrás. Todos saben hacia donde se dirigen. Dios les ha rescatado de la esclavitud de Egipto con propósitos específicos:
1. Para hacerles testigos y protagonistas de milagros.
2. Para que alcancen metas nuevas en Dios.
3. Para que aprendan a caminar al ritmo de la fe.
4. Para que vean cosas más grandes y poderosas que las que ya han visto.
En ese camino de aprendizaje Dios tenia que utilizar métodos, uno de ellos fue el de las dificultades. Hasta ahora ellos habían pensado que todo era color de rosa. (Cómo nos gustaría que fuera así). Al primer obstáculo Moisés corre en busca de un rincón, y allí clama a Dios angustiado. La pregunta es ¿Qué hay que hacer cuando las dificultades nos cierran el paso?. Dios no anda con contemplaciones con Moisés y le dice: “ Di a los hijos de Israel que marchen”. No tenemos derecho a mirar a las circunstancias como algo insuperable; no se nos permite considerarlas como algo decisivo. “ Es la fe y no las circunstancias lo que tiene que imponerse en nuestro ánimo para no desmayar”. Cuando Dios le dice a Moisés dile al pueblo que marche le quiere recordar cuatro cosas:
I. Que en las dificultades es donde EL muestra su poder.
- La orden de caminar es dada antes de que el mar se serene y se divida en dos.
- El pueblo esta encerrado entre el mar y el ejército egipcio.
- No hay por donde escapar.
- Dios podía actuar de mil formas para salvar a su pueblo. ¿Por qué no lo hizo?. Por qué precisamente en las horas de mayor angustia y cuando todo parece más perdido Dios hace sus mayores milagros.
- Te sientes en un callejón sin salida?. Este es el momento de no decaer si no de fortalecernos en fe y esperar el más grande milagro de Dios.
- Dios espera que su pueblo sepa descubrir en las dificultades ocasiones para esperar y recibir un milagro.
- Es cuando aprendemos a confiar en Dios que crecemos y maduramos en la fe.
II. Que la Fé debe ser mayor que el Temor.
- La fe de todos, incluso la de Moisés se vino abajo.
- Qué podía hacer sino orar agónicamente?
- Dios no estaba dispuesto a limitar su acción a consolar a sus espantados hijos.
- Dios le dice a Moisés “¿ Por qué clamas a mi?” di al pueblo que marche, que no se detenga que supere el temor creyendo en el Dios de poder que tienen.
- Dios espera que en cada dificultad nuestra fe se imponga sobre el temor.
- La fe y el miedo son irreconciliables. Donde hay fe no hay miedo. Donde el temor domina la fe no levanta cabeza.
- Años después, a las puertas de Canaán, Israel envía a doce espías. Diez de ellos se muestran pesimistas y acobardados y dijeron: “ No podremos avanzar vamos a morir”. En cambio los otros dos Josué y Caleb, hombres de fe no opinaron así y dijeron: “Subamos, tomemos posesión de la tierra, por qué más podremos nosotros que ellos”. Núm 13:30. Ni Josué ni Caleb negaron que el problema existiese, pero la fe les hizo ver lo que nunca los temerosos e incrédulos han visto: “El triunfo de quienes caminan confiando en Dios”.
- Caminemos al ritmo de la fe y no al son del temor.
III. Que ordena avanzar por que EL va delante de su pueblo.
- Dios se lo había prometido a Moisés.
- Tenemos que concientizarnos de esa verdad.
- El siempre esta con nosotros. La palabra dice: “ Y he aquí yo estaré con vosotros todos los días hasta el fin del mundo”. Mt 28:20.
- Atrevámonos a ser hombres y mujeres de iniciativa. Sólo los atrevidos, los que por la fe han ido adelante, han sido usados por Dios para grandes cosas.
- Quien iba delante del pueblo. Ex 14:19. “El ángel de Jehová”. Is 45:2.
- No dudemos de esta verdad.
IV. Que EL tiene un plan glorioso para su pueblo.
- Dios sacó al pueblo de Egipto para llevarlo a la tierra prometida, tierra que fluye leche y miel.
- Acaso Dios nos salvó para luego desampararnos?
- Acaso Dios se cansará de cuidarnos?
- Moisés está frente al Mar Rojo y Dios le dice: “Vamos Moisés levanta tu vara que es símbolo de la autoridad que YO te he dado. Así como hice señales y prodigios en Egipto así me glorificare hoy”.
- Después de cada milagro vendrá uno mayor, es la lección que Dios le da a Moisés.
- Dios no se limita a salvarnos si no que también tiene un plan para nosotros.
- Con mucha frecuencia perdemos la fe y dejamos de esperar cosas grandes de Dios.
- Dios es el mismo de ayer, de hoy y por los siglos.
- Si algo quiere el diablo es que nosotros perdamos la esperanza y la fe en el poder de Dios.
- Es hora de que nuestra fe se levante.
Conclusión: Que aburrida seria la vida si todo lo que pasara fuera alegría, o todo tristeza o todo pasividad. Lo que le da sabor a la vida son los distintos estados por los cuales el hombre debe pasar en su peregrinaje por esta tierra. La diferencia sea cual sea la etapa por donde estemos pasando la hace Dios, y es precisamente el escenario de la crisis n donde Dios aparece para decirnos que esta con nosotros, para demostrarnos su amor y para mostrar su poder. Es en Dios que nos fortalecemos para no tener temor porque tenemos la seguridad que El va abriendo camino delante de nosotros y tiene un plan que desarrollar con su pueblo. Acerquémonos pues confiadamente al trono de la gracia.
