sábado, 9 de marzo de 2024

Mateo El Sucio Marcos 2:13-17

Introducción:

Una de las cosas más difíciles para el hombre es reconocer. Reconocer que esta equivocado, reconocer sus errores, reconocer que tiene una enfermedad. La razón para no querer reconocer una realidad tiene que ver con la angustia por perder el estatus, con la angustia de que mi imagen se vea deteriorada, con el miedo a ser cuestionado y humillado. Es la intención de no mostrarme vulnerable. Y es que al final el reconocer algo es un acto de humillación y nadie quiere humillarse.

Este es el caso de los escribas y fariseos de la historia. Jesús representaba para ellos la necesidad de reconocer que no eran lo que decían que eran y que eran mas pecadores que aquellos a los cuales acusaban.

Aforismo: Si no reconozco mi suciedad jamás podré disfrutar de la sanidad. (Ser limpiado).

Si no reconozco mi pecado nunca voy a poder ser limpiado.

Para efectos de comunicación sucio es igual a publicano y pecador.

Veamos la secuencia.

Exegesis:

El episodio más impactante que narra Marcos en la capitulo 1 es la liberación de un endemoniado, el segundo es la sanidad de la suegra de Pedro y el tercero la de un leproso. Era tanta la revolución que había causado que dice Marcos ya no podía entrar abiertamente en la ciudad y mucho menos en las sinagogas. Comenzó entonces a predicar en la orilla del mar y en lugares desiertos. Y es precisamente a orillas del mar que enseñaba Jesús a las multitudes que iban y venían (Varias de las antiguas rutas del mundo antiguo cruzaban por Galilea y una de ellas pasaba por Capernaum).  Caminando se encuentra con Mateo quien ejercía una de las funciones mas odiadas por los judíos que era la de cobrador de impuestos y le invita a seguirle. ¿Por qué era Mateo tan odiado? ¿Por qué era Mateo el sucio?

Para los judíos:

-          El sucio estaba tan contaminado ceremonialmente como un leproso.

-          Eran moralmente corrompidos.

-          Eran avaros.

A un hombre que representaba lo que ellos consideraban lo peor, a ese Jesús llama, lo invita a unirse a él.

¿Por qué Mateo le sigue?

-          Posiblemente Mateo era un hombre que estaba aburrido con su vida.

-          Seguramente Mateo quería una nueva vida. Uno de los significados de la palabra levantándose en el texto es: “Resucitar de entre los muertos”.

-          No era muy agradable ser publicano.

-          El mensaje de Jesús toco su corazón. Muy seguramente lo comparo con lo que los religiosos de su época le ofrecían.

-          Toma una decisión sin reversa. Unirse a Jesús como su discípulo.

¿Qué hace Mateo?

-          Organiza un banquete.

-          Invita a sus futuros excolegas (A los sucios) para que conozcan a Jesús.

-          La reunión tenía un motivo misionero.

¿Qué miran los religiosos?

-          La baja reputación de los invitados (Sucios).

-          Lo pecadores que eran. (Dedicados al pecado, lo sucios que eran).

-          Su desobediencia a la ley moral y ritual.

-          Que Jesús se relacionaba y comía con ellos corriendo el riesgo de contaminarse.

¿Qué hacen los religiosos?

-          Quejarse. (Quejarse con señalamiento)

-          Cuestionar.

Para ellos Jesús era muy “blando”. Se relacionaba y comía con los sucios sin señalar el pecado.

¿Cómo era el tema con Jesús?

-          Lo que los escribas y fariseos no tuvieron en cuenta es que para sentarse con Jesús hay que abandonar primero los pecados y luego seguirlo.

-          Es muy posible que Mateo haya hecho este banquete pensando en que sus colegas se sentían igual de vacíos que él y querían una vida nueva. Lo que hace es presentarles a quien se las puede dar. A Jesús. Mateo se da cuneta que Jesús interpreta su necesidad y lo lleva donde los necesitados.

¿Qué dice Jesús?

-          Ustedes no tienen necesidad de medico sino los enfermos. No tienen necesidad de ser limpiados porque no están sucios. No he venido a llamar a justos (Los que se creen limpios) sino a pecadores (Los sucios) al arrepentimiento. (Los señala de vuelta).

-          Él no había venido a curarlos a ellos, ni a llamar a los que eran justos.

-          Ellos estaban satisfechos con su propia suciedad.

-          Se creían superhéroes luchando contra el pecado.

-          Ellos no se consideraban enfermos.

-          Ellos no se consideraban injustos.

-          Ellos eran ciegos y sordos. No entendían.

-          En contraste, los sucios necesitados eran bienvenidos a la limpieza que el maestro ofrecía.

-          La gran diferencia entre publicanos y pecadores con escribas y fariseos es que estos últimos no reconocían su necesidad de Jesús, no reconocían su suciedad. Le seguían los sucios, no los limpios. Ese era el concepto de los religiosos de la época.

-          La gran diferencia era que las publicanos y pecadores querían una vida nueva, querían ser limpios, querían salir de la suciedad mientras que los escribas y fariseos no.

Resonancia:

¿Qué le dice este pasaje a la Iglesia de hoy? Lo comunicare con cuatro R. Hablemos de regreso, rutina, retorno y respeto.

1.        Regreso.

 

-          El llamamiento de Mateo y sus amigos, es un llamamiento para estar limpios, un llamamiento a dejar la suciedad.

-          La primera de las posibilidades que tiene alguien que ha sido limpiado es regresar a su estado inicial, es decir, ensuciarse de nuevo.

-          Es ensuciarse aún más que lo que estaba en su estado inicial.

-          ¿Es ese nuestro caso?

-          ¿Necesitamos una limpieza profunda de nuevo?

-          Lo mas importante: ¿Reconozco que necesito ser limpiado?

-          “Si no reconozco mi suciedad jamás podré disfrutar de la sanidad”

-          Si no reconozco que estoy sucio jamás poder ser limpiado.

 

2.        Rutina.

 

-          La segunda de las posibilidades que tiene alguien que ha sido limpiado es regresar otra vez a la suciedad, pero quizás o aparentemente menor que la inicial.

-          Este estado representa a aquellos que una vez fueron limpiados pero que se acostumbraron a vivir medio sucios.

-          Es un estado donde se consienten algunas cosas que no están bien sin sentirnos mal.

-          Es un estado de convivencia con la suciedad, donde ya es rutinario estar medio sucio.

-          Es un estado donde el llamado ha sido distorsionado por la conveniencia.

-          Es un estado donde ya no existe el sentimiento de culpa.

-          Es un estado donde no siento vergüenza.

Aforismo: “Si no reconozco mi suciedad jamás podré disfrutar de la sanidad”.

 

3.        Retorno.

 

-          Es la invitación del Señor en esta mañana.

-          Retornar a la limpieza inicial. Aquella que recibimos cuando encontramos a Dios con ilusión la primera vez.

-          Retornar a la decisión de estar completamente limpios.

-          Retornar al compromiso de no permitir la más mínima suciedad.

-          Retornar al impulso inicial que nos llevo a seguir a Cristo.

-          Retornar al impulso inicial que nos llevo a tomar la decisión de dejarlo todo por él.

-          Retornar a la limpieza total sin temer a los cuestionamientos de los religiosos.

-          Retornar a la limpieza total superando nuestras propias conveniencias.

-          “Si no reconozco mi suciedad jamás podré disfrutar de la sanidad”

 

4.        Respeto

 

-          Para Jesús el sucio merece respeto.

-          Para Jesús el sucio requiere más de su atención que el que se considera limpio.

-          Si me siento moralmente superior que los demás no estoy entendiendo el evangelio ni a Jesús mismo.

-          Si me siento en la capacidad de juzgar a los demás por considerarme limpio no he entendido la misión.

-          La cizaña convive con el trigo, pero el único que la juzga es el Señor.

-          Jesús nos llama a considerar al sucio como digno de rescate. El sucio es la oveja perdida. Si me considero de las 99, mi misión es rescatar a la que falta.

-          La actitud de superioridad frente a los demás también es suciedad.

 

Conclusión:

¿Con cuál grupo me identifico?

Soy de los que reconozco así sea delante de Dios mi suciedad o soy de los que barren la suciedad debajo de la alfombra del corazón acumulándola mientras me mata lentamente.

¿Cuál de las cuatro situaciones estoy viviendo?

-          Me ensucie de nuevo luego de comenzar a caminar con él.

-          Me acostumbre a vivir medio sucio y medio limpio.

-          Me encuentro hoy con la necesidad de reconocer que necesito ser limpiado completamente para volver a él.

-          Me considero demasiado limpio para mirar al sucio.

“Si no reconozco mi suciedad jamás podré disfrutar de la sanidad”

Si no reconozco mi suciedad jamás poder volver a estar limpio.

jueves, 15 de febrero de 2024

La Curiosidad Mato Al Gato Juan 21:20-25

 Introducción:

“La curiosidad mató al gato” es una de las expresiones más conocidas y es utilizada para indicar a alguien que no hay que saber más de lo que se debe y no hay que traspasar ciertos límites.

Con ella se trata de hacer una analogía entre el ‘peligro’ y un ‘gato’, por ser este un animal que por su peculiar y característica forma de ser suele meterse en cualquier rincón y es considerado un animal que se expone a numerosos peligros y riesgos.

Pedro no murió por su curiosidad, pero vaya que estuvo cerca a otro “Apártate de mí Satanás”.

Jesús en realidad se molestó por la curiosidad de Pedro cuando este le indagó por el futuro del apóstol Juan.

Dos veces le dice: ¿A ti qué?

Creo que Jesús quiere comunicarle a Pedro lo siguiente: Mis planes con Juan no son de tu incumbencia. El final de Juan no es de tu incumbencia. Mi relación con Juan es privada. Las formas, las maneras en que cada uno vive y desarrolla su fe no tienen que ser iguales a las mías.

“Quien anda curioseando, su vida está descuidando”

1.    Exegesis:

1.1 Contexto

Este pasaje aparentemente no tiene contexto y parecería ser un hecho aislado narrado por Juan al final de su libro, sin embargo, el contexto es mucho más amplio de lo que se podría pensar. Los discípulos estaban desorientados luego de la crucifixión de Jesús, sin embargo, hay una palabra clave que conecta el pasaje anterior con el siguiente y es: “Sígueme”.

Al final del versículo 19 aparece “sígueme” en un tono muy personal e individual y marca el final de la conversación privada que tienen Jesús y Pedro. En el versículo 22, aparece la palabra “Sígueme” acompañada del pronombre tú en relación a que el “sígueme” es un tema personal e individual, a que la intimidad y la relación con Jesús es un tema privado y que Pedro no tenia que preguntar que tuviera que ver con Juan ni con ningún otro discípulo.

 

Otro detalle:

Pedro quizás estaba pensando en una cosa: A mí me tuvieron que decir dos veces sígueme. Mateo 4:19. Jesús le dice a Simón y Andrés “Síganme y los hare”. El primer sígueme es para ser formado, el segundo sígueme es para el apostolado. Creo que Pedro también se preguntaba si Juan había necesitado dos sígueme.

1.2  La curiosidad

Ojo a los detalles.

El primero: El intento de Juan por meterse en la cabeza de Pedro es magistral.

Juan pone en la mente de Pedro lo que posiblemente el esta pensando en ese momento.

Lo primero que relata Juan es la mirada. Seguramente Jesús y Juan hablaban al mismo tiempo que caminaban y la pregunta es: ¿Qué le estará diciendo a el sobre su futuro?

Ese relato de Juan acerca de lo que Pedro pudo pensar de su cercanía con Jesús pone a pensar un poco más. Quizás Juan pudo pensar que Pedro aún tenía algún tipo de idea sobre alguna preferencia del maestro con él. Recuerden que en la última cena Juan estaba sentado al lado de Jesús y Pedro le dice que le pregunte quien lo iba a traicionar. Juan acerca como quien va a contar un secreto y le pregunta. Sentarse al lado en esa época era sinónimo de confianza y amistad sólida. (No estaban en una mesa, estaban sentados en el piso). Dramatizar.

Pedro aprovecha la primera oportunidad para acercarse a Jesús y decirle: ¿Señor, a mi me dijiste que yo iba a morir por ti, ese es mi final y cual es el final de Juan?

La respuesta de Jesús es contundente: A ti te concierne lo que tiene que ver contigo, lo de Juan y yo es privado. Si yo quiero que el muera de viejo, ¿Cuál es tu problema?

Lo tremendo de todo esto es la exactitud del relato. A Juan le era imposible saber que el iba a morir de viejo a menos que el Señor se lo hubiera dicho. Y efectivamente Juan murió de viejo.

Para terminar con la exegesis. No se si Juan tenia planeado terminar el libro con el relato de la conversación entre Pedro y Jesús. Lo que si se es que su final es magistral.

Juan nos deja esta ultima lección y  es posible que el intuyó que Pedro pudo pensar en algún momento que su error era justificado y que de alguna manera la conversación que el Señor había tenido con él le daba la razón.

1.3  La comparación

Volviendo al tema de Juan metiéndose en la cabeza de Pedro. Creo que Juan escribe lo que cree que Pedro pudo haber estado pensando.

Juan creía muy seguramente que Pedro estaba comparando la relación de Juan con el Señor con la suya.

Para Juan la relación con el Señor estaba basada en el afecto. Para Pedro la relación con Dios estaba basada en el ímpetu.

Es posible que Pedro pensara: ¿Cuál es mejor? El hecho de que Juan tenga una relación afectiva descalifica mi relación entusiasta e impetuosa.

Tres finales que narra Juan en este capítulo:

El final de Pedro.

Su propio final y su identidad como autor.

El final del libro. Es un final abierto. Sucedieron muchas más cosas y sucederán muchas más cosas a través de los discípulos.

Resonancia:

¿Qué nos dice a nosotros hoy?

Lo primero es que la curiosidad no es aconsejable para un cristiano. Por mucho que veamos no tenemos derecho a preguntar qué pasa o qué pasará con mi hermano que también está siguiendo al Señor. El curioso generalmente termina en chismoso.

1.    Jesús respeta la privacidad.

Tan es así, que se molestó cuando Pedro le pregunta por Juan.

El Señor no divulga el futuro de Juan. Lo deja entrever y deja claro que eso solo es potestad de Él.

Hoy tenemos una costumbre. Nos atrevemos a vaticinar el futuro de los demás y hasta a veces mandamos a gente para el infierno.

Jesús no cede a la tentación de entrar en el rumor y es que seguramente Pedro le pregunta a Jesús porque alguna información se filtró.

Preguntémonos: ¿Hemos caído en la tentación de esparcir o de comunicar rumores?

Creo que Pedro pensó en algún momento: Ahí viene el apártate de mi Satanás. Tal es la fuerza del a ti que raya en la indignación.

En otras palabras: Cuando invadimos la privacidad de alguien, cuando entramos en el juego del rumor estamos provocando la indignación del Señor.

Preguntémonos; ¿Sera que el Señor está indignado conmigo por estar curioseando la vida ajena?

Recuerda: “Quien anda curioseando, su vida está descuidando”

2.    Jesús no tiene preferencias.

Aunque creo que Pedro no fue tan impulsivo y equivocado como antes de la caída, si pudo en algún momento pensar que la conversación que tuvo con el Señor y la recuperación de la cercanía le daba cierto derecho a preguntar por el futuro de Juan.

Jesús deja claro que lo que tenia que conversar con Pedro ya estaba agotado. En otras palabras: No tengo nada más que hablar contigo.

No creas que porque otra vez somos cercanos eso te da derecho a preguntar por la vida de los demás. Eso solo te da derecho a preguntar por tu propia vida.

Hoy tenemos la pretensión de que nuestra principal función es llevar mensajes de parte de Dios a otras personas.

Hoy tenemos la pretensión de que nuestra principal función es estar pendientes de la vida de los demás con el argumento de que somos cercanos. Oramos, ayunamos, leemos la Biblia y nos congregamos. Creer que la cercanía a Dios nos da derecha a ser supervisores de la congregación es una mala concepción de nuestra relación con Dios.

El Señor no nombra ni tiene supervisores en la iglesia. No eres el preferido, entendiendo la palabra como aquel que tiene licencia para vigilar a los demás.

Juan nos deja esta última lección: Cuando Dios está conversando conmigo, acerca de mí, no debo meter a nadie más en la conversación.

Recuerda: “Quien anda curioseando, su vida está descuidando”

3.    Jesús no compara.

Aquí se puede presentar una confusión con el sígueme.

Hay una manera de vivir la vida cristiana y es de acuerdo a los principios de reino.

La forma como nos relacionamos con Dios puede variar de un discípulo a otro.

Para Jesús, Pedro y Juan eran valiosos independientemente de la forma como se relacionarán con él.

¿Qué pasa hoy?

Pensamos que la forma de relacionarnos con Dios es única. Pensamos que mi forma de relacionarme con Dios es la correcta. Quien no se relaciona con Dios como lo hago yo, está mal. Para Jesús el importante eres tú.

Para Jesús lo importante es que entiendas que tienes dos llamados: Uno para ser formado y otro para servir.

Para Jesús lo importante es que enfoques en tu vida: Vivir de acuerdo a los principios del reino.

Tu “Sígueme” es personal e intransferible.

Recuerda: “Quien anda curioseando, su vida está descuidando”

“Si te andas comparando es posible que mal estés caminando”.

Conclusión:

1.    Deja la curiosidad. No seas metiche,

2.    Deja la comparación. Cada que se relaciona con Dios de manera diferente.

3.    Deja la condenación. No juzgues a las personas de acuerdo a lo que tú haces.

Tu “Sígueme” es único.

Recuerda: “Quien anda curioseando, su vida está descuidando”

 

De La Traición Al Martirio Juan 21:15-19

 Introducción:

Comencemos esta reflexión hablando de la traición. Necesariamente tenemos que hablar de la traición porque es el contexto de este pasaje. Pedro había traicionado a Jesús al negarlo tres veces. Su traición tuvo tres aspectos:

-       Traición a la confianza. Puede también decirse traición a la amistad o traición a su maestro. Negó conocerlo.

-       Traición a su llamado. Negó ser parte de los discípulos.

-       Traición a sí mismo. Negó ser un discípulo.

La palabra más común para describir traición en la antigüedad era deslealtad.

Pedro fue desleal con su maestro.

El camino de Pedro hacia la traición o deslealtad fue marcado por un proceso de 3 decisiones.

1.    Contradecir la palabra.

2.    Seguir al Señor de lejos.

3.    Juntarse con los enemigos de Jesús.

La traición fue precedida de un proceso.

Vayamos tomando nota.

Exegesis:

Jesús se aparece a los discípulos, sin embargo, su intención era tener una conversación con Pedro.

Aprovecha el momento después de comer y lo hace. Que mejor momento para una conversación. Miremos los pequeños detalles.

Jesús le pregunta a Pedro tres veces si lo ama.

Posiblemente la razón es que Pedro lo negó también tres veces.

Al final posiblemente Pedro se acordó de la tercera vez que canto el gallo y se entristeció.

Las preguntas de Jesús van encaminadas a recuperar la lealtad de Pedro hacia Él, de tal manera que Pedro nunca más lo volvería a traicionar.

El Señor entonces quiere recuperar tres cosas: La relación, la entrega y al ministro.

-       La relación

¿me amas más que estos?

¿me amas?

¿me amas?

El Señor deja claro que la relación es basada en el amor y que si Pedro se iba a comprometer a algo con el debía ser sobre esa base.

O sea, le esta diciendo: Pedro, si no estas seguro de amarme no prometas nada.

-       La entrega

De cierto, de cierto te digo: Cuando eras más joven, te ceñías, e ibas a donde querías; más cuando ya seas viejo, extenderás tus manos, y te ceñirá otro, y te llevará a donde no quieras. 19 esto dijo, dando a entender con qué muerte había de glorificar a Dios. Y dicho esto, añadió: Sígueme.

Le esta diciendo: Pedro de ahora en adelante es a otro precio. Si te comprometes ahora vas hasta la muerte.

Comenzando desde la entrega y la consagración.

-       Al ministro

Apacienta mis corderos

Pastorea mis ovejas

Apacienta mis ovejas

Pedro acepta las condiciones y dice:

Señor, tú lo sabes todo; tú sabes que te amo

Y entonces el Señor le dice: Sígueme.

Resonancia:

¿Que nos dice a nosotros hoy? Para nuestra reflexión.

Lo primero es una pregunta:

¿Cómo iniciamos el año 2022?

¿Traicionando al maestro o siendo leales al maestro?

Recordemos el proceso de Pedro

-       Contradijo la palabra

-       Se alejo de Jesús

-       Se junto con los enemigos de Jesús

Es posible que hoy no estemos contradiciendo la palabra, pero si interpretándola de acuerdo a nuestras conveniencias.

¿Estamos lejos del Señor?

¿Nos estamos juntando con aquellos que no lo siguen?

Lo anterior llevo a Pedro a la traición.

¿Y yo?

¿He traicionado su confianza?

¿He traicionado su llamado?

¿He negado lo que soy? ¿Cómo me definen mis actos?

Es posible que muchos de nosotros estemos peleando por el récord en negarlo.

¿Qué nos da el Señor hoy? (A pesar de todo)

-       La oportunidad de volver a él.

-       La oportunidad de recuperar nuestra identidad.

-       La oportunidad de recuperar nuestro servicio.

¿Tito me amas? (3 veces)

Ahora dilo con tu nombre. (3 veces)

¿Qué respondemos ante esa pregunta?

¿Tito estas dispuesto a entregarme tu vida desde ahora y hasta el día de tu muerte?

Ahora con tu nombre

¿Qué respondemos a esa pregunta?

¿Tito, ahora si estas listo para un servicio leal y hasta el día de tu muerte?

Ahora con tu nombre

¿Qué respondemos a esa pregunta?

Para Pedro el pasado era pasado y ahora se conversaba sobre su futuro.

Para nosotros igual. Estamos conversando con el Señor sobre nuestro futuro.

Las heridas y las marcas del pecado quedaron atrás.

¿Qué respondemos frente a semejante bondad de parte del Señor?

Conclusión:

Ejercicio cada uno con su nombre. (Colocar preguntas en el video beam).

¿Tito me amas? Si Señor. Vuelve a mí.

¿Tito me amas? Si señor. Entrégame tu vida.

¿Tito me amas? Si Señor tu lo sabes todo, tu sabes que te amo. Sírveme y se fiel a mi hasta el día de tu muerte.

Oremos.

 

 

 

 

Mateo El Sucio Marcos 2:13-17

Introducción: Una de las cosas más difíciles para el hombre es reconocer. Reconocer que esta equivocado, reconocer sus errores, reconocer ...