sábado, 18 de julio de 2009

Roberto Ricardo Calderon Guette 1.926-2.002

En días pasados, se cumplieron 7 años de haber fallecido el hermano Roberto (Cariñosamente se le llamaba de esa manera, curiosamente nunca oí a nadie decirle pastor Roberto o pastor). Luego de su conversión y de haberse graduado en el Seminario de Costa Rica en el año de 1.954 y de su posterior matrimonio en 1.955 con Regina Romero Mogollón, comienza a predicar el evangelio en casi la totalidad del territorio de la costa norte colombiana siendo instrumento de Dios para impactar con el mensaje a toda la región. A finales de los 50, participa en la fundación de la AIEC y es ordenando como pastor en 1.961. Pastorea la Iglesia Central de Sincelejo por espacio de 48 años continuos. Su carácter manso, su apacibilidad, su entrega y consagración al Señor reflejada en el ejercicio de su ministerio, fueron inspiración para muchos de sus discípulos. Desde la Iglesia Central De Sincelejo (Primera Iglesia Evangélica de la ciudad), coordino la evangelización de Sincelejo y los pueblos aledaños. En épocas de dificultades por intolerancia religiosa, acceso limitado (caminos, trochas), recursos económicos escasos y demás, muchos hermanos salieron con inmensa alegría y gozo, superando con su entrega y pasión las adversidades dejándonos hoy una herencia de entre 50 y 60 Iglesias cristianas en Sincelejo y otro tanto en los pueblos cercanos. Es de destacar que hasta el día de su muerte, el hermano Roberto jamás se ufano ni se engrandeció a costa de los resultados de su ministerio, su humildad fue la constante que marco sus relaciones con los demás. Su vida era en si una cátedra permanente para todos sus discípulos y para aquellos que ocasionalmente teníamos la oportunidad de hablar con él o escuchar sus enseñanzas. Inquieto, estudioso de las Escrituras, sin lugar a dudas dejo una marca en muchos de nosotros y en la Iglesia cristiana de Sincelejo en general. Tuve la oportunidad de conocerlo en 1.988, siendo miembro de otra Iglesia de la ciudad, siempre hubo afecto, amabilidad y cariño. Nunca falto un abrazo y una sonrisa de satisfacción de su parte al saludarnos. Lo que yo podía entender aunque nunca se lo pregunte era que le daba gusto de encontrarme y ver que permanecía, que seguía fiel en mi discipulado con Cristo y pienso hoy que su alegría era ver que la gente que se convertía permanecía fiel a Jesús. La AIEC, siempre recordara que Dios uso un hombre manso, humilde, entregado a Su Señor, para revolucionar con el evangelio a una ciudad, a un departamento, a una región y ese hombre se llamo Roberto Ricardo Calderón Guette. Gracias a Dios por El y por aquellos que hicieron parte de ese grupo de valientes que bajo su dirección proclamaron el evangelio en Sincelejo y Sucre, entre los que se encuentran nuestros bisabuelos, abuelos, padres, suegros y otros más. Gracias a Dios por que encontró a un hombre con corazón dispuesto para dejarnos el Evangelio como herencia. Por último, hemos tenido acceso a material inédito del Hermano Roberto, el cual estamos seleccionando para compartirlo con ustedes. Este material será publicado con autorización expresa de su familia. Dios les bendiga.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

quiero saber si soy familide de usted, mi nombre es arley narvaez guette correo ar_ley1@hotmail.com,
busco mi familia en todo el mundo

JORGE PEREZ dijo...

Hola,..mucho recuerdo a mi pastor,..admiro a toda su familia.

JORGE LUIS PEREZ LLANOS
MEXICO D.F

Mateo El Sucio Marcos 2:13-17

Introducción: Una de las cosas más difíciles para el hombre es reconocer. Reconocer que esta equivocado, reconocer sus errores, reconocer ...