Del Dicho Al Hecho Hay Mucho Trecho ROMANOS 10:8-10

INTRODUCCION:

La principal característica de las epístolas de Pablo, es que en ellas el apóstol trabaja primero la parte doctrinal, para terminar en la aplicación práctica de la misma. En lo que respecta a romanos, Pablo trabaja la parte doctrinal de los capítulos 1 al 11, y la parte práctica del 12 al 16. Noten que al comienzo del capítulo 12, el apóstol comienza con “Así que”, es decir por todo lo anteriormente expuesto. Pero que es lo Pablo ha expuesto en los primeros 11 capítulos de romanos, básicamente tres cosas: Primero, la culpabilidad del hombre, segundo la justificación por la fe en Cristo y tercero la victoria de los creyentes. En la intención del Apóstol, la base doctrinal es expuesta para que esta se refleje en la práctica. Dentro de este bloque de capítulos llama la atención que los capítulos 9 al 11 son dedicados a Israel. Dentro de este contexto se da la declaración de Pablo acerca de cuál es el mensaje y cual la reacción del oyente del mensaje. Entonces, si estos capítulos son dedicados a Israel, podríamos hacernos varias preguntas:

1. ¿Es esta declaración aplicable solo a Israel? El mensaje original fue escrito para ellos. También hay mensaje para nosotros.

2. ¿Cuál es el significado de la misma para el pueblo de Israel? En el momento en que el libro de romanos fue escrito, el significado para el pueblo era: Si es necesario, debo morir por la causa de Cristo. Si el murió por mi yo muero por él.

3. ¿De qué forma podríamos aplicar este mensaje a la Iglesia hoy?

Lo veremos más adelante.

4. ¿Cuál es el sentido particular y cual el general de este texto?

El particular: Confesar a Cristo es la evidencia de mi conversión (En esa época), el general: Confesar a Cristo me puede costar la vida. (Renuncia a la vida vieja y exposición a la muerte).

5. ¿Qué circunstancias externas pudieron influir en la forma como el apóstol formula estos versículos?

Dos. En primer lugar, la persecución. Pablo buscaba crear conciencia. Si sigo a Cristo debo estar dispuesto a morir por él. En segundo lugar, examinar la convicción de los cristianos frente a las amenazas de muerte. El cristiano convencido no le temía a la muerte.

Estas preguntas surgen solo de una simple observación del texto y su contexto. Además de las preguntas planteadas podemos hacer la siguiente pregunta:

1. ¿Es la interpretación actual de este texto la correcta?

 

2. ¿Podemos aplicar estos versículos a los no cristianos tal como se hace hoy?

Quiero hacer un recuento de la interpretación actual. Hoy se toma de manera literal el texto, afectando la integralidad del evangelio, reduciendo su mensaje. ¿Pero es que lo que se dice hoy?

1. Confiesa a Jesús como Salvador.

2. Recíbelo en tu corazón.

3. Serás salvo.

Esta es la parte central de muchos mensajes de los evangelistas de hoy. No importa lo que suceda después. Ustedes saben al igual que yo que muchas de las decisiones de fe que se dan en las campañas evangelistas son superficiales y muy poca gente permanece. El énfasis del mensaje es en la confesión y no en la vida que debe darse después de la confesión.

Antes de seguir quiero hacer algo de exegesis:

Corazón: Centro de la vida física y espiritual. Centro y asiento de la vida espiritual. La sede de la inteligencia, la voluntad y el carácter. El centro emocional del hombre. La parte más profunda del ser humano. Nuestro problema es que hemos reducido la decisión de fe a algo meramente emocional.

Confesión: Convicción que te lleva a ser fiel a Dios aun a costa de tu propia vida.

Estar de acuerdo con lo que predicaban los apóstoles.

Reflexionemos en este texto desde el punto de vista histórico. Si nosotros leemos los libros de historia que hablan del siglo I, tanto de autores cristianos como no cristianos (Eusebio y Josefo para citar dos), nos vamos a encontrar con un escenario de constante persecución hacia los discípulos. El libro de romanos se escribe entre el año 57 y 60 y recordemos que en el 70 fue el sitio de Jerusalén. 

La primera pregunta que surge es: ¿Qué significaba y que implicaciones tenia ser cristiano en el siglo I?

Veamos que podemos encontrar:

1. Significaba entrar en el grupo de los perseguidos.

2. Significaba el aislamiento de la sociedad no cristiana.

3. Significaba el anonimato.

4. Significaba la reducción de oportunidades laborales.

5. Significaba invertir lo que tenía en función de predicar el evangelio.

6. Significaba aportar lo que tenía para que otros pudieran predicar el evangelio.

7. Significaba entender que el dar era un acto libre, espontaneo y alegre del cual no esperaba retribución alguna de los hombres ni de Dios. (Hablando del sentido estrictamente económico). Además la actitud de los primeros cristianos era totalmente sacrificial, basada en el amor y la solidaridad con los hermanos y no en el interés material. (Hechos 2).

8. Significaba estar en constante peligro de muerte.

9. Significaba renunciar a tener una familia con el fin de que soltero o soltera se dedicara totalmente a predicar el evangelio. De hecho muchos hombres y mujeres prefirieron este camino.

10. Significaba el gozo y la alegría de morir por causa de la fe, porque aquello era morir como su Señor aunque su sacrificio no representara lo mismo. Era un honor y hasta una dignidad considerada como no merecida morir por no negar a Jesús.

Creo que pudiera seguir escribiendo muchos significados más, pero creo que con eso es suficiente para ubicarnos.

Adonde quiero llegar?

Pablo escribe: “Si confesares con tu boca que Jesús es el Señor”……..

Solo me referiré a esta parte. Si leemos una y otra vez los puntos enumerados arriba y vamos a este texto, nos queda claro que la decisión de aquellos que se entregaban al Señor era precedida de una total convicción de lo que podía suceder con sus vidas, sin embargo ellos estaban dispuestos a todo. Es más la historia corrobora lo que estoy diciendo.

Decir (confesar) entonces era un tema de vida o muerte. Luego de decir (confesar) viene vivir (los hechos que demuestran lo que soy). Que tanta distancia hay entre lo que digo y lo hago?.

La segunda pregunta es: Que significa y que implicaciones tiene ser cristiano hoy?.

La respuesta es la antítesis o lo contrario a lo dicho en la primera parte. Veamos.

1. Significa pertenecer a un grupo social que cada día crece más y toma más fuerza dentro de nuestra sociedad. Se podría decir que ser cristiano en algunos grupos da status. Significa aceptación en vez de persecución.

2. Significa aceptación aun en la sociedad no cristiana.

3. Significa la expresión pública de mi fe sin ningún temor.

4. Significa para muchos la apertura de oportunidades laborales.

5. Significa una vida con poco sacrificio tanto de tiempo y dinero. Muchas veces no hacemos ni ayudamos a que otro haga. A los cristianos de hoy nos encanta la comodidad.

6. Significa la oportunidad de hacer dinero, esperando que Dios me retribuya lo que he sembrado. Las motivaciones para dar son diferentes al igual que el énfasis.

7. Significa seguridad. En la mayor parte del mundo no matan a nadie por ser cristiano. Hay zonas identificadas donde eso sucede. En la antigüedad era donde estuviera el creyente.

8. Significa la falta de compromiso y consagración. El cristianismo de hoy se vive de manera muy superficial. Amar a Jesús y obedecerle no está de moda, lo que está de moda es el utilitarismo, usar a Dios como un medio y no como un fin en sí mismo. Lo que hoy se enseña y predica en muchos pulpitos es a Dios como siervo del hombre no el hombre como siervo de Dios.

Concluyo con tres cosas:

- Debido a lo expuesto anteriormente, hoy en día los cristianos (y me incluyo), hemos perdido credibilidad. Hay una crisis de credibilidad. El no cristiano no cree en lo que predicamos por que no ve que lo vivimos. Es muy fácil predicar pero muy difícil vivir.

Este cristianismo que hoy practicamos dista años luz del cristianismo del siglo I. Me puede decir eran otros tiempos y eso es correcto pero la Palabra sigue siendo la misma, 

Dios el mismo, y los fundamentos de la Iglesia los mismos, los que somos diferentes somos nosotros.

- Noten que lo que llevaba a los primeros cristianos a dar la vida por su Señor (Jesús), eran sus convicciones. El cristianismo que hoy vivimos carece de convicciones y raíces profundas en el Señor y su Palabra. Eso es lo que está haciendo la diferencia. De allí que no baste con confesar o hacer una decisión de fe. Ese confesar debe ir acompañado de arrepentimiento y fe que me conduzca a un cambio radical de vida, una vida que agrada a su Señor. Si lo anterior no se produce la confesión o decisión de fe que se hizo carece de todo sentido y de hecho no es la entrada al Reino De Los Cielos, Las confesiones sin convicciones llevan a un cristianismo mal entendido y lleno de mal testimonio. Reflexionemos pues en estas cosas y que Dios nos ayude.

- Históricamente, la Iglesia perseguida es la que más ha honrado a Jesús, y la reflexión que hago a continuación la he escuchado de muchos de nuestros pastores por más de 20 años. ¿Por qué debe haber persecución para que la Iglesia Honre a su Señor con su vida y testimonio?. ¿Por qué tiene que haber persecución para que la Iglesia ande en santidad?. ¿Por qué si hoy tenemos un entorno favorable para vivir y expresar nuestra fe y ser cristianos íntegros sin ningún tipo de presión, no aprovechamos para ser hombres y mujeres convencidos y arraigados en nuestro Padre e ir hasta el final con El no importando las consecuencias?. Ahora les hablo con el corazón. Hay una razón para que esto suceda y es que nuestro amor hacia Dios es poco y no da para entregarnos totalmente a Él. Mi oración en estos días es: “Señor te pido que mi corazón se derrita de amor por ti, que no haya reservas para Ti en mi vida, quiero enamorarme de Ti mi Señor y es que tu amor demostrado por mí en la cruz y en todo el transcurso de mi vida desde que te conozco no me da otra opción. Me tienes acorralado Jesús, por donde camine encuentro tu amor hacia mí de una forma contundente, no hay más nada que yo pueda hacer sino amarte. Ayúdame a amarte hasta el punto de negarme a mí mismo cada día con tal de demostrarte mi amor atraves de mi obediencia”.

Dios les bendiga